Todos los árboles y sus palmas fueron talados.

Fotos | Albeiro Rudas | LAPATRIA

Todos los árboles y sus palmas fueron talados.

En medio del aplauso de algunos habitantes por los nuevos cambios y la crítica de otros ciudadanos por la tala de todos los árboles, comenzó la remodelación del nuevo parque central del municipio de Risaralda, para lo cual se planteó una inversión que asciende a los $1.673 millones 659 mil 725, recursos provenientes de un empréstito.

Según la Alcaldía, la obra contempla la construcción de un parque tipo plaza, con el fin de mejorar su capacidad y que sirva de escenario para los diferentes eventos que se programan en el Municipio.

Por esta razón, toda la actual estructura fue levantada, sumado a la tala de árboles, entre ellos un viejo guayacán amarillo, hecho que generó el reclamo y voces de rechazo entre la comunidad. Incluso ha pintado letreros en la lona verde que instaló el Municipio para comenzar las obras, con mensajes como "No a la tala de los árboles".

Malestar

Diana Cárdenas tiene su pequeño negocio de papelería en un costado del parque y dijo: “sufrí mucho cuando presencié la tala de los árboles porque era el hogar de muchos animales, especialmente aves, pero poco se hizo porque al parecer ya contaban con los permisos. Allí había palmas y otra especies, ojalá siembren nuevos árboles que den sombra y hagan de este nuevo parque un sitio agradable para descansar”, sostuvo.

Por su parte Luis Antonio Álvarez, otro habitante, sostuvo que: “para poder arreglar hay que dañar y creo que el nuevo parque va a quedar muy bonito". Algo similar sostuvo Gabriel Corrales, quien observa todos los días el avance de las obras. "Había que derribar los árboles, pero confío en que siembren unos nuevos que den mucha sombra”.

Habrá resiembra

El secretario de Planeación municipal, Daniel Felipe Gutiérrez, sostuvo que varias de las especies tenían más de 30 años y además se tenía el reporte de que amenazaban riesgo, motivo por el cual se tuvieron que retirar. Explicó que algunos tenían hongos o ya estaban inclinados, hecho que está sustentado a través de los reportes Corpocaldas y de Bomberos.

La promesa es que por cada árbol que se tumbó se sembrarán cinco en otros lugares del municipio, como una especie de compensación. Adicionalmente prometió que en el mismo parque sembrarán nuevos árboles, pero con especies aptas para esta zona, cuya raíz no sea tan invasiva ni se afecte a la misma comunidad. Por ahora revisan que especie son más idóneas, y que se podrían incluir árboles como el mismo guayacán que se debió derribar. La promesa es terminar en diciembre.

Así quedaría el nuevo parque en el municipio de Risaralda.

La tala de árboles en el parque originó voces de rechazo.

La comunidad se ha quejado, incluso con mensajes en la misma obra.

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