EFE | LA PATRIA | INTERNACIONAL

El ataque contra la tercera ciudad más poblada de Irán, supuestamente por Israel - que no lo ha confirmado -, ha causado una gran preocupación en la comunidad internacional y llamamientos a que ambos países detengan su enfrentamiento.

Israel lanzó presuntamente la madrugada de ayer misiles contra Irán en la provincia de Isfahán. Pero Irán ha negado el ataque: primero dijo que las defensas antiaéreas habían derribado drones y luego señaló que fueron “objetos voladores”.

El Ejército iraní dio a entender ayer que no responderá al ataque con drones que sufrió y que no causó daños.

“Gracias a nuestra vigilancia, se disparó a objetos voladores”, dijo el comandante en jefe del Ejército de Irán, el general de división Abdul Rahim Musavi, a la agencia iraní Defa Press, especializada en defensa.

Ante la pregunta de si Irán responderá a la agresión, Musavi afirmó: “Ya se ha visto la respuesta de Irán”, en una aparente alusión al ataque del pasado sábado a Israel.

Las autoridades israelíes guardan un silencio casi absoluto. El único que se ha pronunciado ha sido el ministro israelí de Seguridad Nacional, el ultraderechista y colono Itamar Ben Gvir, que en redes sociales ha publicado una única palabra: “¡Espantapájaros!” (en argot hebreo “débil”), en referencia a una publicación anterior en la que pedía que la respuesta israelí al ataque de Irán con más de 300 drones y misiles no fuera un “espantapájaros”.

Estados Unidos se negó a pronunciarse sobre el presunto ataque. La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, fue cuestionada reiteradamente en una rueda de prensa sobre la información y la posición que Estados Unidos tiene sobre ese episodio, pero se negó a responder al respecto. La tensión y la inquietud en Oriente Medio han ido extendiendo desde el ataque iraní del sábado, en medio del estancamiento de las negociaciones para una tregua en la Franja de Gaza.

Siria acusó a Israel de querer arrastrar a Oriente Medio “al infierno de una guerra regional”.

La capital del Imperio Persa

Isfahan, cuyos alrededores han sido objeto de un aparente ataque por parte de Israel, es la tercera ciudad más poblada de Irán y su principal destino turístico, además de albergar en sus cercanías la mayor central nuclear iraní, la de Natanz.

Isfahan (Sepahan), cuenta con una superficie de 250 kilómetros cuadrados, está situada en el centro de la meseta principal de Irán y su población supera los dos millones de habitantes.

Fue capital de Imperio Persa en el año 1047, bajo los selyúcidas, condición que perdió 180 años más tarde con la llegada de los mongoles y que recuperó en el reinado del rey safávida Abás I, principal impulsor de su embellecimiento y de las grandes obras que hoy la adornan.