Fotos | LA PATRIA María Corina Machado.
EFE | LA PATRIA | CARACAS
El Gobierno venezolano está reactivando "la modalidad más violenta de represión", con una nueva ola de detenciones a opositores acusados de supuestas conspiraciones como la llamada Operación Brazalete Blanco, indicó ayer la Misión Internacional Independiente de la ONU para Venezuela.
La líder opositora venezolana María Corina Machado responsabilizó ayer al presidente venezolano, Nicolás Maduro, de la "brutal represión" que -considera- se ejerce contra su partido, luego de conocerse la detención del jefe de la formación, Henry Alviárez, y de la secretaria política, la exdiputada Dignora Hernández.
"¡Alerta mundial! El régimen de Maduro desata brutal represión contra mis equipos de campaña (...) Estas acciones cobardes pretenden cerrar el camino de Venezuela hacia el cambio y la libertad en paz y democracia", señaló en X la exdiputada, elegida en primarias como la candidata de la mayoría opositora para las presidenciales del 28 de julio.
Machado también alertó sobre las solicitudes de aprehensión dadas a conocer horas antes por la Fiscalía en contra de siete miembros de su partido, Vente Venezuela (VV), entre ellos la jefa de su campaña, Magalli Meda.
Horas antes de los llamadas de alarma de Corina Machado, el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, informó de la detención de Alviárez y Hernández por su supuesta vinculación con planes violentos relacionados con los comicios de julio, en los que Maduro buscará un tercer sexenio consecutivo en el poder.
Saab aseguró que los capturados planeaban "acciones violentas" para "forzar" la inscripción de la candidatura de Machado, sobre quien pesa una sanción que le impide competir por cargos de elección popular.
En una comparecencia televisada, el fiscal mostró un video con la confesión de Brandt, en la que habla de los planes para generar "disturbios", en coordinación con algunos militares desertores que se encuentran en el exterior, para "subvertir el Estado, generando acciones desestabilizadoras".
Al respecto, Machado desestimó la veracidad de este testimonio al criticar el "modo de obtención de confesiones que aplica el sistema" y ratificó su confianza en Brandt, a quien le reiteró su apoyo, igual que a los detenidos esta jornada, con quienes no ha tenido comunicación -dijo- desde que fueron arrestados.
"Todo lo que dijo el fiscal del terror es falso, todo es mentira", dijo Machado ante periodistas. La exdiputada aseguró que el Gobierno "intercepta todas" las comunicaciones de su equipo político y "sabe" que no están detrás de planes violentos sino "organizando un país para avanzar en una ruta electoral" y "derrotar a (el presidente) Nicolás Maduro".
"El régimen quiere cerrar el camino al cambio, a la libertad en paz, porque saben que están derrotados, porque no hay manera de que puedan ganar una elección contra nosotros", concluyó Machado.
Condena internacional
El encargado del Departamento de Estado de EE.UU. para América Latina, Brian Nichols, condenó ayer las detenciones efectuadas contra opositores venezolanos y consideró que son "inconsistentes" con los acuerdos electorales. Lo mismo hizo Argentina que abogó por la celebración de elecciones democráticas y transparentes. Los exmandatarios que integran la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA) tacharon de "terrorismo de Estado" las acciones del régimen venezolano contra la líder opositora venezolana María Corina Machado y su partido.