LA PATRIA | Manizales

Jonathan Ballesteros, director de la Oficina de la Internacionalización de Manizales, habló este viernes con LA PATRIA Radio sobre la creación de esta dependencia y los proyectos que impulsará a largo plazo. Esto dijo: 

¿Cuál es el objetivo de la oficina?

Esta oficina se creó este año. Uno de los temas que estaban acéfalos en el territorio era el posicionamiento internacional y una gestión organizada de cooperación internacional. También había la necesidad de un escenario que dialogue con otros estamentos institucionales público-privados, como la Cámara de Comercio y los distintos gremios, para articular desde las capacidades de una Alcaldía las posibilidades de ser un destino mucho más atractivo de la inversión extranjera directa y apoyar a los empresarios que tuvieran interés de llegar a estos mercados.

Bajo ese escenario se crea esta oficina, que desde el 15 de febrero empezó a generar un proceso que sin duda le empieza a otorgar a la ciudad una vocación internacional. Solo 13 ciudades de los más de 1.100 municipios de Colombia tienen una institucionalidad que genera procesos administrativos dentro de la lógica de la internacionalización. 

¿Cuáles son algunos de los proyectos que se vienen?

Veníamos de un antecedente que lamentablemente no nos debe causar risa, a pesar de que fue una burla nacional. Teníamos un reconocimiento negativo por no saber hacer un ejercicio de internacionalización serio.

En ese escenario, y sin el ánimo de poner un espejo retrovisor, había que recuperar la confianza de muchos actores en un ejercicio de internacionalización organizado. ¿Qué hemos gestionado? Un encuentro entre los multiactores, con los que hemos interactuado y empezado a poner metas comunes y objetivos.

Estos dos meses y los siguientes van a ser ejercicio muy fuerte de reposicionamiento de la ciudad. Hay que volver a conversar con los actores internacionales, con las embajadas, con las cámaras binacionales, con las consejerías económicas de las embajadas, con las agremiaciones, con las redes de ciudades a las que pertenecemos, para volver a decir que Manizales está enfocada en un proceso serio de internacionalización. 

¿Cómo vender la idea de que esta apuesta es a largo plazo? ¿Cómo no dejarse llevar por la necesidad de las victorias tempranas?

Esto es una creación orgánica dentro del sistema institucional de la Alcaldía de Manizales y no es una asesoría o un consultor que llega y va dependiendo del vaivén contractual. Aquí empieza a dotársele a la ciudad un marco institucional con una oficina que pertenece al despacho del alcalde. No es un asunto menor.

Así hay un escenario de garantía, ya hay una experiencia profesional que permite no avanzar en la propuesta de internacionalización con carreras que solo sean para la foto. El primer gran ejercicio que tenemos que hacer es un proceso de reposicionamiento, que nos va a permitir, en los tiempos que tanto la corporación internacional como la gestión de la inversión extranjera dan, que se vayan cumpliendo los objetivos.

Esto no son triunfos que se logren en dos o tres meses. Yo siento que ya la ciudad siendo sede de eventos internacionales empieza a tener esos logros. Lo que viene después, sin duda, sería constituir una política pública de internacionalización que logre blindar y que le ponga profesionalismo al ejercicio de la internacionalización de la ciudad. 

¿Cómo funciona esa mecánica de la diplomacia entre ciudades y con el Gobierno nacional? 

Las ciudades como Manizales podemos llegar a tener diálogos directos con las embajadas, debido a temas de proporcionalidad. Nosotros no somos una ciudad pequeña: si nos comparamos con cualquier ciudad capital de Centroamérica o del Caribe, seríamos la segunda ciudad en cada uno de esos países. Debemos entender que tenemos las herramientas para jugar en un contexto internacional de una manera clara, sólida y entre iguales. 

Escuche la entrevista completa aquí: