Otty Patiño (izquierda), delegado del Gobierno Colombiano, y el negociador jefe del Eln, Israel Ramírez, alias Pablo Beltrán, se saludan durante el inicio del tercer ciclo de los diálogos de Paz entre el Gobierno nacional y esta guerrilla, en La Habana (Cuba).

Fotos | EFE | LA PATRIA

Otty Patiño (izquierda), delegado del Gobierno Colombiano, y el negociador jefe del Eln, Israel Ramírez, alias Pablo Beltrán, se saludan durante el inicio del tercer ciclo de los diálogos de Paz entre el Gobierno nacional y esta guerrilla, en La Habana (Cuba).

LA PATRIA | MANIZALES

Tras cinco meses de persecución, el Gobierno espera, por fin, concretar un cese al fuego bilateral con el Ejército de Liberación Nacional (Eln) que se ha mostrado esquivo al respecto. Desde ayer, La Habana (Cuba) volvió a ser crucial para la búsqueda de la paz entre el Estado y esa guerrilla.

“Celebro el inicio de la tercera ronda de diálogos en Cuba entre el gobierno de Colombia y la delegación del Eln. Confío en que se alcanzarán resultados importantes en los temas previstos en la agenda, incluyendo el cese al fuego y la participación de la sociedad”, señaló Carlos Ruiz Massieu, jefe de la Misión de Verificación de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Colombia y quien estuvo presente en el acto protocolario.

De este modo, la tendencia de las instituciones acompañantes del proceso exhorta a que se concrete una tregua armada, como lo evidenció también el representante de la Iglesia Católica en la mesa, monseñor Héctor Fabio Henao, quien aseguró que “el cese al fuego es una de las grandes exigencias de este momento y, muy vinculadas con él, las respuestas a situaciones humanitarios complejas”.

Acompañantes, garantes y equipos negociadores del Gobierno y el Eln durante la instalación del tercer ciclo de diálogos, en La Habana.

Debate sobre menores de edad

Dentro de la pretensión de alto al fuego, el cese de hostilidades será clave. “Hay que definir cuáles son las acciones que se consideran hostilidades, que no son propiamente combates o enfrentamientos bélicos entre las dos partes”, le explicó a LA PATRIA una fuente cercana al proceso de diálogos.

Las minas antipersona, el desplazamiento forzado, el reclutamiento y uso de menores y la extorsión son, por ejemplo, acciones que pueden entrar en la categoría de hostilidades que se quieren frenar. “En la mesa aún no se ha hablado sobre reclutamiento y uso de menores de edad por parte del Eln”, según la fuente consultada por este diario.

Si bien Antonio García, comandante del Eln, negó recientemente que esta organización reclute menores de edad, lo cierto es que se espera que el alistamiento forzoso y el uso de menores como campaneros, por ejemplo, sea abordado por la mesa como un capítulo especial y se tomen decisiones al respecto, debido a su componente humanitario.

Participación social

Aunque se ha mencionado el deseo de que la sociedad civil tome la palabra, una deuda que debe saldar la mesa de negociaciones en esta etapa será la definición de mecanismos para que las poblaciones afectadas por la guerra puedan realizar propuestas de paz.

Precisamente para preparar las iniciativas que hacen de este ciclo un punto álgido, ambos equipos negociadores llegaron con cinco días de anticipación al punto de encuentro para realizar talleres, recibir asesorías técnicas y adelantar preparativos por separado. Del mismo modo, el cumplimiento de los alivios humanitarios acordados por el Ejecutivo y el Eln en el Bajo Calima y el Medio San Juan pasará por revisión.

¿Bajas en el equipo del Gobierno?

“No puede estar presencialmente, pero tendrá disponibilidad de tiempo completo para cualquier consulta y, cuando se requiera, llegará a la mesa”, le reveló el jefe negociador del Gobierno, Otty Patiño, a El Espectador frente a los rumores sobre la salida de la periodista María Jimena Duzán de la mesa de negociaciones. Sin embargo, el mismo medio confirmó que la comunicadora y política Mábel Lara dejó su puesto como negociadora.

Discurso de partida

La senadora y negociadora del Gobierno María José Pizarro fue la encargada de dar el discurso de instalación en esta ocasión. Durante su declaración, la legisladora cuestionó que, si bien millones de compatriotas han crecido en una "dramática exclusión" y eso ha llevado "a la rebeldía a miles de colombianos" en busca de avances sociales y democráticos, "es una realidad irrefutable la angustiante degradación de la guerra en Colombia". Asimismo, Pizarro aseveró que las economías ilegales han "eternizado" el conflicto armado.

La senadora María José Pizarro, hija del asesinado Carlos Pizarro, quien fue candidato presidencial para las elecciones de 1990 por la Alianza Democrática M-19 (movimiento político surgido tras la desmovilización de la guerrilla homónima), instaló este martes con su discurso el tercer ciclo de negociaciones entre el Gobierno colombiano y el Eln.

Próxima sede

A pesar de que en días anteriores el senador y negociador Iván Cepeda le dio a conocer a Blu Radio la propuesta del Gobierno para que la mesa sesione en Colombia, LA PATRIA conoció que este tema se ha hablado un poco en los ciclos anteriores, pero aún no ha sido acordado. “Al terminar el ciclo, se decidirá dónde será el próximo y bajo qué condiciones”, aseguró una fuente cercana a los diálogos.

Mientras tanto, el presidente del régimen cubano, Miguel Díaz-Canel, se mostró honrado por albergar las conversaciones: “Reafirmamos nuestro compromiso y nuestra voluntad de contribuir al éxito de este diálogo en el propósito común de alcanzar la Paz para la hermana nación”, comentó.