El Fenómeno de El Niño tiene a Colombia sitiada. En las últimas semanas se han presentado más de 500 incendios, de los cuales hay aproximadamente 30 activos. Son 600 municipios los que están en alerta roja, la mayoría concentrados en la región Andina. Manizales es una de las ciudades amenazadas. Hay que tener en cuenta que una posible conflagración en los bosques localizados en las laderas de la ciudad nos puede golpear muy duro. No solo por las afectaciones ambientales, los riesgos a los pobladores vecinos, sino también porque estos son los reservorios de agua de las cuencas que abastecen el acueducto de la ciudad.
El fenómeno de El Niño, junto con los efectos del cambio climático, está afectando muy fuertemente la producción agrícola, lleva a la suspensión en el suministro de agua y/o su racionamiento y genera una alta probabilidad de un apagón eléctrico. Lamentablemente este fenómeno llegó cuando el país no está en sus mejores condiciones. La inflación todavía está muy alta y la economía no está en su mejor momento.
El 2024 lo iniciamos con un fenómeno de El Niño en todo su furor. En enero solo ha llovido un día. Las temperaturas son muy altas. Se dice que el fenómeno nos acompañará hasta abril y se prevé que lo sentiremos aun con más intensidad en febrero y marzo.
Fueron muchos los avisos que alertaron sobre la presencia del fenómeno de El Niño; sin embargo, fue muy poco lo que hizo el Gobierno nacional para establecer un plan de contingencia. El fenómeno está pegando muy fuerte y todavía falta mucho tiempo para que termine y el Gobierno nacional se nota perdido y desubicado. Históricamente no hemos tenido una planeación eficiente para atención de riesgos. Cuando llueve se inunda el país y se derrumban las carreteras y en las sequías se queman los bosques y escasea el agua.
Hay municipios sin agua y son muchos los que están en riesgo de racionarla. Aguas de Manizales debe estar muy pendiente de los niveles de los ríos y quebradas que abastecen las plantas de tratamiento de la ciudad.
El riesgo del apagón eléctrico es alto, lo delicado es que el Gobierno lo ha desestimado y las cosas no están claras. Por ejemplo, hay retraso en la entrada de las cuatro turbinas de Hidroituango, el nivel de los embalses no está en su mejor nivel y está bajando. Hay dudas con la operación de las térmicas, que son las que deben soportar el sistema cuando este entre en dificultades.
Como se mencionó anteriormente, el fenómeno también está impactando al agro colombiano. Se puede intuir cómo se encuentran las áreas rurales del país, al ver el estado en que están los prados de los separadores viales y de las zonas verdes de la ciudad. Se ven quemados, y las flores de los parques se están muriendo.
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Al Gobierno le cuesta mucho trabajo respetar la independencia de poderes. Al Congreso lo tiene dominado y controlado. Al poder Judicial lo ataca sin contemplaciones con sus intervenciones públicas y a través de las denominadas “bodegas” de las redes sociales.
Ante el retiro del fiscal general de la Nación, por terminación de su periodo, el presidente se ha dedicado a atacar muy fuertemente a la vicefiscal, que va a ser la encargada de la Fiscalía, mientras se nombra al titular. Con respecto al nombramiento del fiscal, también está encima de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, que son los encargados de nombrar a este funcionario público.
Se está en espera de la decisión de la Corte Constitucional con respecto a la petición que le hiciera el ministro de Hacienda para que anulara el reciente fallo de este tribunal con respecto a un tributo que tendrían que pagar las empresas vinculadas al sector de los hidrocarburos. Decisión que puede ser un indicador de cómo va a ser el comportamiento de esta Corte cuando llegue a su consideración la revisión constitucional de la reforma a la salud cuando salga aprobada por el Congreso de la República.
Con la suspensión por tres meses del canciller por la Procuraduría, cuya falta se dio por una orden del presidente y que fue cumplida con un manejo plagado de errores, ya se conocieron fuertes reclamos de este último, muy posiblemente se activarán las bodegas, se acudirá a todas las instancias jurídicas, tanto nacionales como internacionales, y Petro luchará fuertemente por acabar con la Procuraduría General de la Nación. ¡¡¡Ay de aquel que se atreva a atacar a Petro!!!