LA PATRIA | MANIZALES

El gobernador (e) de Caldas, Carlos Ánderson García Guerrero, a través de los decretos 508 y 509 designó este viernes a Luis Gonzaga Carmona Noreña como alcalde de La Merced y a José Óscar González Hernández como alcalde de Pensilvania para lo que resta de este periodo constitucional 2020-2023 después de que quienes fueron elegidos para ese cargo por elección popular renunciaran a las administraciones de sus respectivos municipios.

Según se lee en los documentos, tanto Carmona Noreña como González Hernández cumplen con las calidades requeridas y no están incursos en causales de inhabilidad, "en especial las contenidas en el parágrafo 3 del artículo 29 de la Ley 1471 de 2011, que hace remisión expresa a los numerales 1,4 y 5 del artículo 37 de la Ley 617 del 2000, incompatibilidad o impedimento legal alguno" para ser designados como alcaldes.

Quiénes son

El mandatario de los pensilvanenses, que comenzará sus funciones a partir de este sábado 2 de septiembre, ya se había desempeñado en este cargo entre el 2001 y el 2003. También fue personero del municipio y diputado de Caldas. Asumió el mando tras la renuncia de Jorge Orlando García Restrepo, elegido en el 2019 por el Grupo Significativo de Ciudadanos Pensilvania Primero, quien actualmente es investigado por la Procuraduría General de la Nación por presunta participación en política.

El secretario de Planeación de Caldas y gobernador encargado, Carlos Ánderson García (izquierda), posa con el acta que nombra a José Óscar González como nuevo alcalde de Pensilvania.

Por su parte, su homólogo mercedeño venía de desempeñarse como operador de sistemas del hospital de su municipio, donde además fue analista técnico, de acuerdo con su perfil en el sitio web de Función Pública. Anteriormente Carmona fungió como gerente de la Empresa Municipal de Aguas y Aseo de La Merced, entre el 2020 y el 2021. Él asume como mandatario tras la renuncia de sus dos predecesores, Jhónatan Manuel Vásquez Duque (2020-2022) y Juan Fernando Ospina Nieto (2022-2023), que dejaron el cargo por su participación en el entramado delincuencial de Las Marionetas.

Ambos exalcaldes se encuentran en prisión domiciliaria con permiso para trabajar. El primero logró un preacuerdo con la Fiscalía General de la Nación de 53 meses de condena y el segundo preacordó 33 meses.