Foto | www.freepik.es | LA PATRIA | La adecuada nutrición infantil resulta crucial para el desarrollo de sus capacidades. Consulte en su EPS, si tiene dudas al respecto. En la medida de lo posible, procúreles frutas y verduras en sus raciones diarias.
Elizabeth R. Rojas
LA PATRIA | Manizales
Las 235 muertes probables de niños por desnutrición que detalló el Instituto Nacional de Salud (INS) en Colombia, en lo corrido del año, encendieron las alarmas sobre la atención que se le presta en el país a los infantes. De esa cifra, 124 serían por una forma aguda de la condición.
Daniela Blandón García, profesional universitaria de la Dimensión de Seguridad Alimentaria y Nutricional de la Dirección Territorial de Salud de Caldas (DTSC), lamentó el reporte del INS, pero se mostró satisfecha al decir que ninguno de esos decesos correspondía a pequeños del departamento.
Exaltó el trabajo que hacen desde su despacho: "Reconocemos la desnutrición aguda como una urgencia vital, que requiere atención prioritaria e inmediata. En el departamento, a la fecha (semana epidemiológica 40), tenemos 0 casos reportados".
Blandón especificó que a pesar de que hay tanta prevalencia de desnutrición a nivel nacional, desde la DTSC desarrollan acciones conjuntas, con las localidades, para evitar complicaciones y muertes por desnutrición en las zonas que les corresponde proteger.
En la acción
Desde la Dimensión de Seguridad Alimentaria y Nutricional de la DTSC, cuando se sospecha esta falencia en un infante, según la experta, se verifica la activación de la ruta de atención integral a la desnutrición, eso apoyados en la Resolución 2350 del 2020.
"Se realiza, además, adherencia a todas las ESE e IPS del departamento para que realicen la atención, de acuerdo a la normatividad vigente. Hay dos tipos de atención: la intrahospitalaria y la ambulatoria".
Se conoció que con la intrahospitalaria, que se realiza posterior a las complicaciones del menor, se hace el tratamiento a través de la fórmula F75, que solo se maneja en las instituciones de salud. La forma ambulatoria, en tanto, se hace con productos avalados por el Ministerio de Salud y Protección Social y, en consecuencia, por la DTSC.
Una forma de maltrato
El pediatra Carlos Montoya, abanderado del afecto en la región, dijo que el asunto de la desnutrición infantil confluyen muchas aristas y que dramáticamente tienen un mal fin.
"Están los niños con problemas orgánicos, como los cardíacos, que les impiden absorver los alimentos en la forma correcta. Este es un problema de salud pública que requiere de constante seguimiento de las autoridades de salud", indicó.
Según Montoya, la desnutrición infantil puede darse por varias cosas; una de esas la negligencia social, dada a partir del desplazamiento que algunos tienen que vivir en las zonas rurales en las que nacieron o se criaron.
"Hay negligencia familiar, que pasa por problemas económicos, porque no hay plata para comprar los alimentos requeridos para ellos. Otra forma de negligencia es la que sucede por desconocimiento nutricional, donde la gente no sabe qué comer. El Estado debe garantizar, de muchas maneras, que les lleguen los alimentos esenciales".
Montoya criticó: "Está mal también la familia que le proporciona al padre la presa más grande, cuando el que la necesita es el pequeño que está en crecimiento. La corrupción social hace mucho daño, pues hay quienes se roban los recursos que deben llegar en alimentación a los niños más necesitados".