La Corte Suprema de Justicia le negó ayer la prisión domiciliaria por enfermedad al excongresista caldense Mario Castaño Pérez.

La Corte alegó que no hay un dictamen médico oficial que demuestre esos padecimientos. El político del Partido Liberal permanece recluido en La Picota y padece, según él y su defensa: "Obesidad mórbida, hipertensión arterial estadio (3) severa, diabetes mellitus tipo II, dislipidemia severa, tromboembolismos pulmonares asociados a embolismos de origen venoso".

En el alegato del excongresista y su defensa se argumentó que no se le había brindado un sitio de reclusión que garantizara las condiciones mínimas vitales para salvaguardar sus derechos mínimos vitales ante la ocurrencia de un evento fatídico.

Lo que sí sugirió la Corte es que se realice un trámite ante el Inpec para que lo valore Medicina Legal y así tener un concepto oficial.

"Se instará al Inpec y a la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (Uspec), a través de la entidad que haya contratado o a la que se encuentre afiliado el señor Mario Alberto Castaño Pérez, a garantizar la atención médica y los cuidados que sean requeridos conforme a las prescripciones de los médicos tratantes", puntualizó la Corte Suprema de Justicia.

El exsenador se desplomó el 15 de febrero en la cárcel La Picota, en el sur de Bogotá, donde se encuentra recluido, y les manifestó a los guardianes que acudieron a socorrerlo que tenía un fuerte dolor en el pecho. Lo trasladaron a la Clínica Universitaria Colombia donde le realizaron un cateterismo.