El periodista y fotógrafo Diego Jiménez denunció las presiones policiales de las que presuntamente fue víctima el pasado 1 de mayo mientras tomaba fotos a un evento de música que se llevó a cabo en el parque Antonio Nariño, en el sector de El Cable de Manizales.

En el sitio se concentró un grupo de personas, a quienes la Policía les solicitó que se retiraran debido a que había personas consumiendo estupefacientes y por el sitio, hacia las 6:00 p.m., pasaban familias y menores de edad, lo que generaba incomodidad.

Al final, llegaron a un acuerdo de permitirles tocar media hora más, momento en el que se retiraron los asistentes. En ese momento, el fotógrafo se acercó a registrar lo que ocurría.

Manifestó que un momento después se le acercó un uniformado y le preguntó con qué autorización contaba para tomar fotos, le dijo que no podía hacer eso y además le exigió la tarjeta profesional, demostrar que fuera de un medio o la autorización de la Alcaldía.

Luego le dijo que haber subido una foto a la red social X era un delito y amenazó con enviarle a alguien "de civil". Posteriormente le presentó su cédula y cuando la gente empezó a grabar, el agente se retiró. Jiménez denunció el caso ante la Fundación para la Libertad de Prensa (Flip).

Cumplían con su deber

La Policía respondió que cuando los uniformados verificaban los permisos de los organizadores, el periodista se acercó a tomar fotos y estos, por su seguridad, procedieron a solicitarle su identificación porque no lo conocían y le solicitaron el carné o tarjeta de periodista.

Añadió que no hubo mal trato y en los videos se puede apreciar lo que ocurrió, además Jiménez no se negó a presentar su documento. Además justificó que a diario solicitan a cualquier ciudadano que se identifique por seguridad.